Ilumina espacios exteriores con focos solares: claves para elegir bien
¿Por qué tanta gente tiene interés por los focos solares focos solares? Es una de las guías más visitadas de mi web, y yo creo que es porque resulta una manera muy sencilla de iluminar jardines, fachadas exteriores, terrazas, etc. sin cargar más la factura de la luz.
Y cuando digo focos, me refiero a cualquier tipo de luz que tenga el mismo uso, me da igual que en los catálogos las llamen lámparas, apliques, proyectores o hasta antorchas solares.
Todas son lo mismo: fuentes de iluminación, ambiental o directa, que no consumen energía de la red porque se alimentan de una pequeña placa solar.
Aunque realmente los focos solares son unos dispositivos muy sencillos, voy a dejarte aquí algunas indicaciones que te pueden servir para elegir el tipo de foco que quieres.
A continuación te doy varios consejos para que no falles, tanto en el tipo de foco que más te interesa como en sus características.
Focos solares y otros tipos de iluminaciones autónomas
Los focos solares, y cualquier luz solar en general, son dispositivos de iluminación muy sencillos, formados por un conjunto de luces led, paneles solares fotovoltáicos (normalmente, integrados) y una batería recargable.
Funcionan por ciclos diarios. En horas diurnas el pequeño panel solar carga de energía la batería, y por la noche esa energía acumulada se utiliza para generar luz.
Tambien pueden tener un sensor que active la luz cuando empieza a anochecer o un mando a distancia para encenderlos manualmente.
Vamos, más simple no puede ser.
Por eso es muy importante ubicarlos correctamente, alejados de sombras de árboles o tejados que puedan restar horas de sol. O elegir uno que tenga la placa solar aparte, de forma que puedes poner el panel en un sitio donde haya sol a tope y el foco en otro más sombreado.
Aparte de eso, tampoco esperes que tengan todo el año el mismo rendimiento. Es lógico, porque en invierno hay menos exposición a la luz solar.
Dicho esto, vamos a echar un vistazo al mercado, a ver qué tipo de lámparas solares puedes encontrar:
Focos solares
Son los más populares y los que más se venden. Se instalan en paredes, árboles, postes e incluso en el suelo. Tienen una iluminación ambiente que suele ser intensa, aunque menos que los proyectores.
Antorchas solares
Están muy de moda para iluminar jardines o terrazas. Son pequeños farolillos que se clavan en el suelo y se utilizan para iluminar caminos de acceso, marcar parterres o, simplemente no dejar la terraza en la oscuridad y alegrarla con pequeños puntos de luz.
Hay versiones más simples y otras con más “cuerpo”, también conocidas como bolardos o postes solares. En cualquier caso, su potencia lumínica es pequeña.
>> Mira aquí una selección con las 10 luces o antorchas solares con mejor relación calidad-precio.
Proyectores solares
Su iluminación es más potente y dirigida que los focos solares. Se suelen utilizar para iluminar zonas de paso: entradas, pasillos y zonas muertas.
Estos dispositivos sí tienen de sensores de movimiento, porque normalmente no es necesario que estén encendidos constantemente, solo cuando pasa una persona (o animal). Luego, se apagan a los pocos segundos.
Apliques solares
Están diseñados para que se puedan fijar a la pared y normalmente tienen una pantalla embellecedora, ofrecen una iluminación ambiente para cualquier sitio.
No solo se usan para exteriores en los que no llega una conexión de red, sino también en interiores -como un salón-, por pura estética. Huelga decir que necesitarán estar cerca de una ventana expuesta al sol o un lugar similar, para que puedan recargarse.
Guirnaldas solares
Este sistema de iluminación ya se aleja algo más de la idea de foco solar, pero la he incluído porque, además de que es una forma económica de tener luz exterior, son muy bonitas estéticamente.
Y es que las luces solares no son solo prácticas, también son un recurso estético. Decorar con luces es una forma muy barata de sacarle mucho más partido a cualquier espacio, y en ese sentido, la variedad de «gadgets» solares es una tentación asequible para cualquier bolsillo.
Para que veas de qué hablamos: con más y menos lúmenes, con batería incorporada, con la placa solar aparte… Hay bastantes opciones para comparar. Además, tienes una guía al final para orientarte en la compra.
3 cosas a tener en cuenta para elegir tus focos solares
Antes de comprar focos solares te recomiendo que le eches un vistazo a la guía de compra, en el enlace que te he dejado justo arriba. Pero, además, te añado 3 claves rápidas:
¿Qué temperatura del color te gusta más?
El color de una bombilla LED, que es el tipo de lámpara que usan todos los dispositivos que te detallé hasta ahora, se expresa en lo que se conoce como temperatura de color, que no tiene nada que ver con lo térmico, sino con la sensación de mayor o menor calidez que aportan.
Según los grados Kelvin (K) que tenga la temperatura de color, obtendremos unas tonalidades u otras.
- Color blanco cálido: Tiene temperaturas por debajo de los 3000º K
- Color blanco neutro: Temperaturas entre los 4000 y los 5000ºK
- Color blanco frío: Temperaturas por encima de los 6000º K (este color es poco usado en este tipo de iluminación autónoma).
¿Cuánta autonomía tienen los focos solares?
La autonomía es el tiempo que nuestro foco u otro dispositivo solar puede permanecer emitiendo luz al anochecer.
Esta puede variar según el tipo de dispositivo solar, según la marca y según la intensidad de iluminación.
Las antorchas solares son las que tienen una menor autonomía, los focos pueden tener autonomías entre las 5 y las 24 h, y los proyectores casi “ilimitada” si no se están encendiendo todo el tiempo.
El producto que compres tiene que mostrar esta información en su embalaje, así que es fácil elegir en función de tus necesidades.
¿Cuál es la potencia luminosa?
El nivel de iluminación o, para ser precisos, el flujo luminoso de todos estos dispositivos solares, es fundamental según el lugar en el que lo quieras instalar.
El flujo se mide en lúmenes y lo habitual es que esté en el rango entre los 50 y los 1000.
Estos son los rangos habituales:
- Flujos lumínicos pequeños: De 50 a 300 lúmenes. Son ideales para antorchas solares, pero poco más.
- Flujos lumínicos medios: De 300 a 600 lúmenes. Los que tienen los focos solares. Es una iluminación bastante intensa.
- Flujos lumínicos grandes: Más de 600 lúmenes. Habitualmente solo los tienen los proyectores solares. El objetivo es iluminar con intensidad zonas concretas.
Cómo se instalan los focos solares
Tanto los focos como las lámparas, los apliques, los proyectores o las farolas solares son muy sencillos de montar: destornillador, martillo, taladro atornillador y una broca de widia. Ay, y un nivel para no hacerlo a ojo, también es muy recomendable.
Y lo que más me gusta: ¡Nada de cables! Esa es la maravilla de esta tecnología solar, que además es sostenible y respetuosa para el medio ambiente.
Creo que con los ejemplos de guías que te he dejado tienes suficiente donde elegir. Espero que estés aprovechando el verano para mirar con otros ojos la iluminación de los espacios exteriores y colocar luces solares donde sean útiles… y donde ayuden a convertir espacios «del montón» en lugares agradables, cálidos y en los que apetezca estar.