Diferencias entre paneles solares monocristalinos y policristalinos
Desde las primeras instalaciones solares la tecnología ha avanzado mucho, pero aún así el meollo de la cuestión siguen siendo las diferencias entre paneles solares monocristalinos y policristalinos.
Aunque hay más, estos son los dos tipos básicos de placas solares. Si estás pensando en montar una instalación de autoconsumo solar o una instalación aislada, son los primeros que debes mirar
A continuación te cuento todo sobre ellos, para que lo veas más claro.
Y, si estás buscando modelos concretos, siempre puedes pasarte por esta comparativa y guía de compra de paneles solares.
Paneles solares monocristalinos
Hay una forma inmediata de reconocerlos: son los de color negro. Tan simple como eso.
Los paneles solares monocristalinos son los de mejor calidad y están formados por células que proceden de un cristal de silicio.
El nombre “mono” hace referencia a su origen procedente de una sola pieza de la materia prima: el cristal de silicio se corta sin que se realicen otros procesos y, de esa forma, se obtiene un nivel de pureza máximo. Eso es algo que ayuda mucho a que la placa solar pueda absorber y transmitir mejor la energía del sol.
Suelen ser la opción más recomendada debido a que su nivel de efectividad supera de manera notable a los policristalinos.
Y hay casos concretos en los que son imprescindibles. Por ejemplo, si el espacio disponible para hacer la instalación de paneles solares no es demasiado grande, es mejor recurrir a unos que alcancen la mejor eficacia. Si es tu caso, quédate con la tecnología monocristalina.
Además, hay que tener en cuenta que la durabilidad de los paneles monocristalinos es superior, lo que ayuda a que sean una buena inversión pensando en el largo plazo.
Paneles solares policristalinos
Si los paneles monocristalinos son de color negro, los policristalinos son azules. Pueden ser de distintos tonos de azul dependiendo del acabado que hayan recibido. En su composición, su principal diferencia radica en que no se han elaborado como corte de una única pieza de cristal.
En el proceso, las células del panel han perdido pureza, ya que para la elaboración se usan cortes de silicio solidificados entre sí. Es decir, se utilizan cortes de distintas piedras que acaban formando una estructura que comparte su naturaleza, pero que no tiene el mismo nivel de pureza.
Eso es algo que se nota en el rendimiento que aportan las placas solares, menor que las monocristalinas.
¿En qué se diferencian los paneles monocristalinos de los policristalinos?
Te doy la respuesta rápida: el precio.
Los paneles monocristalinos se utilizan desde mucho tiempo atrás y siempre han estado considerados como la mejor opción. El uso de paneles policristalinos es más reciente y responde a las necesidades de la sociedad de recurrir a un tipo de célula solar que resulte más económica.
El precio de las placas policristalinas es más asequible y puede ser la opción ideal para quienes tienen un presupuesto ajustado.
Otra diferencia es que los paneles policristalinos se calientan antes, así que una vez avanzan las horas, su capacidad para absorber y transmitir energía es inferior.
Por su lado, aunque los monocristalinos necesitan un poco más de tiempo, en el momento en el que alcanzan su máximo aportan un volumen de energía solar que está muy por encima del que es capaz de ofrecer una placa solar policristalina.
¿Cuándo se recomienda cada uno?
Recuerda que ambos tipos son interesantes a su modo y que no debería haber inconveniente en que tu vivienda tenga un tipo u otro.
Lo más probable es que el instalador con el que estés consultando te haga una propuesta con ambas opciones explorando la obtención del mejor rendimiento y relación calidad-precio con cada uno de ellos. Así podrás ver qué supone la instalación de uno o de los otros tipos.
De todas formas, es cierto que hay situaciones en las que una recomendación u otra es más clara.
Por ejemplo, los paneles monocristalinos son ideales en zonas en las que llueve o en las que suele haber un clima con nubes. Estas células que tienen una gran capacidad para hacer la absorción del sol y actúan con eficacia incluso en condiciones adversas. La radiación del sol que se absorba se utilizará de una forma más apropiada y podrás disfrutar de un buen flujo energético.
Por su lado, los paneles policristalinos se calientan antes, pero responden mejor que los monocristalinos ante situaciones de sobrecalentado. Eso favorece que, si vives en una zona en la que haya mucho calor o sol, puede ser una buena opción. En una zona con mucho sol puedes sacarles partido.
¿Y si un panel policristalino tiene más celdas y más potencia?
Esta es otra pregunta que puedes hacerte. Y tiene mucha lógica. Pero, incluso en unas circunstancias como esas, un panel monocristalino te dará mejor resultado.
Si tienes la opción de instalar paneles policristalinos con más W y más celdas que los monocristalinos, estos van a ocupar más espacio en tu tejado. Esto puede ser un problema sobre todo en viviendas, donde el espacio suele ser más limitado.
¿Cuánto duran los paneles solares monocristalinos y policristalinos?
Esta es otra diferencia, aunque no tan determinante, puesto que a la hora de hacer una valoración hay otros detalles que tienen relevancia. Se estima que los paneles monocristalinos están por encima en durabilidad que los policristalinos y que, a lo largo del tiempo, mantienen ese nivel de eficacia de hasta un 30% superior.
Partiendo de una durabilidad estandarizada de 30 años (aunque hay paneles solares que pueden llegar a los 40 años sin problemas), si anualmente la potencia nominal se reduce en un 0.5%, y los monocristalinos están hasta un 30% por encima, está claro que el ahorro a largo plazo será superior.
Aunque a corto plazo un panel solar policristalino puede parecer más barato, la realidad es que con el paso de los años los monocristalinos se amortizan más fácilmente.
¿Quieres saber más sobre instalaciones solares? Antes de comprar, compara. Revisa mis guías de compra para no gastarte el dinero a ciegas.